Lo primero que debemos saber es que las piezas dentales temporales realizan su erupción con un orden cronológico, el primer grupo de dientes que hace su erupción a los 6 meses son los centrales inferiores, luego los centrales superiores, laterales superiores y, finalmente, laterales inferiores.
El intervalo de separación de crecimiento de cada par de dientes suele ser de 2 - 3 meses. Una vez que han hecho erupción los 8 incisivos hay un período de descanso en la erupción dental de 4 - 6 meses.
El segundo grupo de dientes hace su erupción a los 16 meses, los primeros dientes de mi bebe molares y a los 20 meses los caninos. El tercer grupo de dientes hace su erupción, siendo estos los cuatro segundos molares, que tardan en salir unos 4 meses. La dentición temporal completa se alcanza a los 30 meses.
Mientras que aparezca algún rastro de la erupción del primer diente, se debe limpiar la encía del bebé con una gasa húmeda que cubra su dedo índice y con suavidad debe ser pasada por todo el borde, limpiando además la lengua. Todavía no necesitas usar pasta dental.
Las bacterias que hay en la boca, no pueden dañar las encías antes de que salgan los dientes, sin embargo, es difícil saber cuándo empezarán a crecer los dientes de su bebé, así que es bueno empezar la rutina de limpieza temprano.
Tomar el hábito de limpiar la boca de tu bebé, como parte de su rutina diaria, efectivamente facilitará la costumbre de lavarse los dientes más adelante.
Al iniciar la erupción de los dientes de tu bebé busca un cepillo dental especial para bebés, con una cabeza pequeña, cerdas suaves y un mango grande apropia para tu mano. Usa una pequeña cantidad de pasta y asegúrate que sea sin flúor, así como el tamaño de un grano de arroz.
Cepíllale los dientes con suavidad, tanto la parte de enfrente como la de atrás, dos veces al día. Trata de cepillarle la lengua para eliminar las bacterias que pueden causar mal aliento. No necesitas enjuagarle la boca, ya que solo estás usando una pequeña cantidad de pasta dental.
En cada visita de tu bebé al pediatra, este debe revisar sus dientes, si tiene alguno, aplicar barniz de flúor cada tres a seis meses, dependiendo de lo propenso que sea tu niño de desarrollar caries.
Se recomienda llevar a tu bebé a ver al odontopediatra dentro de los próximos 6 meses, después de que le haya salido su primer diente. Cuando tu niño vaya al Odontopediatra, asegúrate de informarle acerca de los tratamientos de flúor que tu hijo ya recibió en el consultorio de su pediatra.
Evita exponerlo al exceso de flúor, ya sea en la pasta dental o a través de agua embotellada. Consulta con tu dentista o pediatra alguna información acerca del uso de flúor para tu bebé.
